Con dos goles de Diego Jara, la figura de la cancha y del ascenso, Patronato logró anoche instalarse en la segunda categoría del fútbol nacional. Barrios Suárez y González se fueron expulsados en Santamarina.
Santamarina perdió anoche en Paraná ante Patronato por 2 a 0 y no pudo lograr el anhelado ascenso a la B Nacional, categoría a la que intentará llegar mediante la promoción. El Aurinegro no pudo plasmar en la cancha el juego que soñó y al quedar con dos hombres menos el esfuerzo realizado no le alcanzó.
Patronato salió a presionar a su rival, buscando jugar lejos del golero Bértoli. La presión se hizo sentir en los primeros minutos, con Leclerq y Jara rotando por todo el frente de ataque, más la presencia de Ferrero y Echagüe en la recuperación y el aporte por las bandas de Urresti y Espínola.
Un remate de media distancia de Echagüe en donde respondió muy bien a Bertoya, fue la primera situación de riesgo generada por el local.
Santamarina aguantó esa embestida inicial de Patronato y lentamente fue acomodándose en la cancha. Darío González fue el encargado de alimentar a los puntas. Telechea en algunas intervenciones que tuvo se mostró desequilibrante, especialmente cuando se tiró por el costado derecho, mientras que Barrios Suárez luchaba con los defensores rivales que se escalonaban para tomarlo.
El partido era muy parejo, típica final donde se luchaba más de lo que se jugaba, sin embargo el local acertó y se puso en ventaja para estirar la diferencia en el global. Un centro desde la izquierda de Márquez fue peinado por Jara quien superó la estirada de Bertoya y selló el 1 a 0 parcial. Minutos después Barrios Suárez le tiró un manotazo al defensor Gracini que vio el árbitro Montero quien le mostró la roja directa.
Once contra diez, a los de Tandil se les hizo muy difícil. Patronato manejó todo el juego ante un rival que intentaba ser prolijo en el traslado del balón, pero que carecía de profundidad como para inquietar el arco defendido por Sebastián Bértoli.
Leclerq tuvo su ocasión entrando por la izquierda que salvó Beratz con lo justo y más tarde un disparo de Espínola que rechazó Bertoya. El equipo conducido por Marcelo Fuentes también dispuso de un gran quite y habilitación de Ferrero para Jara, evitando una nueva conquista del local Bertoya tirándose sobre la derecha.
Antes del epílogo de la primera parte, Leclerq estuvo a punto de aumentar pero su cabezazo se fue desviado.
Santamarina no tuvo profundidad en la primera parte y perdió por una irresponsabilidad a su goleador. Patronato que jugó mejor, con una aparición de Jara se fue en ganador al descanso.
En la parte final Patronato esperó su momento mientras Santamarina intentaba progresar en el terreno buscando la igualdad que le permitiera soñar, pero no tenía profundidad. Diego Jara solo dentro del área elevó lo que hubiera significado el segundo tanto. Luis Murúa buscando contar con mayor agresividad en la zona ofensiva mandó a la cancha a Cuestas en lugar de Krüger, pasando a tener tres defensores y un poco más retrasado a Bucci para ser en algunos momentos lateral – volante. Sin embargo el equipo visitante perdió a González y quedó con nueve hombres, luego de que a instancia del asistente anulara un gol convertido por Beratz.
Si ya con un jugador menos la historia para Santamarina era por demás complicada, con dos directamente hipotecó la promoción ante la CAI, teniendo en cuenta que el actual plantel es muy corto y con juveniles como recambio.
El “Patrón” tuvo todos los espacios que quiso y el dominio absoluto de las acciones. Desbordó por los costados, generó ocasiones y transformó en figura a Bertoya quien sostuvo la mínima diferencia todo lo que pudo. Llegó el minuto 32, la perdió Giménez, aceleró Jara eludió al golero de Tandil y definió al gol para liquidar la serie definitivamente.
Un remate de Giménez que sacó abajo Bértoli y un cabezazo de Cuestas fueron las acciones de mayor riesgo para la visita en el complemento. Tras esas acciones, el partido no tuvo equivalencias. Si el local no anotó más goles es porque sus jugadores fallaron en la definición y en otras ocasiones se apiadaron de los nueve hombres que con una enorme dignidad aguantaron todo lo que pudieron.
Patronato solo tuvo que esperar la finalización para desatar oficialmente la fiesta que se había preparado en los días previos. El equipo de Paraná fue el mejor de la final, ganó en Tandil y anoche y logró el merecido ascenso a la B Nacional.
Santamarina deberá asimilar en pocas horas el impacto de no haber alcanzado el ascenso en forma directa. Murúa deberá reodernar un equipo que no tendrá ni la usina de fútbol ni al principal goleador, motivarlos para buscar ante la Comisión de Actividades Infantiles el pase a la segunda categoría del fútbol argentino. Será difícil pero no imposible.
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